No hay nada más sincero que la mirada de un niño, si quieren reir… rien y si no están a gusto se les nota. Por eso nos encanta fotografiarles y siempre hacemos que se sientan super cómodos y sobre todo buscamos su diversión en las sesiones. Al instante entenderán que para nada será una obligación sino un juego y para ello la clave es la paciencia por lo que en nuestras sesiones nos tomamos el tiempo que el pequeñin necesite para adaptarse y comenzar a ser el mismo consiguiendo así fotografías naturales y sinceras.